Protocolo Para El Manejo De Las Víctimas Y El Respeto A Sus Derechos

El pasado 6 de Septiembre, en la Gaceta Oficial del Distrito Federal se dio a conocer el ACUERDO DEL PROCURADOR DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL POR EL QUE SE EMITE EL PROTOCOLO DE ACTUACIÓN DE LA PROCURADURÍA GENERAL DE JUSTICIA DEL DISTRITO FEDERAL, EN LA REALIZACIÓN DE DILIGENCIAS MINISTERIALES IN SITU, PARA EL RESCATE, PROTECCIÓN Y ATENCIÓN DE LAS VÍCTIMAS O POSIBLES VÍCTIMAS DEL DELITO DE TRATA DE PERSONAS.

Esta es una muy buena noticia,... con un nombre muy largo!

Este acuerdo contiene el protocolo que deberá seguir todo el personal de la Procuraduría General de Justicia del DF, cuando participen en operativos de rescate, protección y atención de víctimas de trata, para garantizar el respeto a los derechos de las víctimas durante éstos.

Muy seguido, las víctimas sufren un verdadero tormento por parte de autoridades insensibles, ignorantes, y frías. Enfrentar a la autoridad, aún como víctima, es un proceso traumático para muchas de ellas. Su estado psicológico empeora. Sus niveles de ansiedad, temor y desconfianza aumentan. El estrés en medio del proceso se dispara. Todo esto puede impedir que la víctima coopere adecuadamente con la autoridad para la investigación del delito, y ésto retrasa que pueda iniciarse un proceso en contra de los tratantes. Además que también muy seguido resulta en violaciones a sus derechos como víctima.
Hasta el viernes pasado, no existía un mecanismo que garantizara el respeto a los derechos de las víctimas a manos de las autoridades; ahora, el cumplimiento de este protocolo logrará precisamente eso.

Algunos de los puntos que incluye el protocolo son la confidencialidad, la especialización de las autoridades en el tema, la identificación de la víctima como tal por parte de las autoridades, la no discriminación, la no revictimización, la presunción de minoría de edad, la prioridad de la atención de la niñez, la reserva de identidad de la víctima, el derecho a recibir los servicios de acuerdo sus necesidades concretas, y la restituición de sus derechos.

El protocolo contiene instrucciones tanto para el personal operativo (el que participa en el rescate o atención personalmente) como para el personal administrativo (todos quienes lleven el manejo administrativo del caso), y un capítulo entero hace especial mención de la coordinación de las diligencias ministeriales in situ (quién participa, qué medidas se deben de tomar, etc.). Además, establece que la Dirección General de Derechos Humanos participará en la planeación y ejecución de las diligencias ministeriales, para garantizar la no violación de los derechos humanos en el proceso.

Es una buena noticia saber que vamos avanzando el la lucha contra el crimen de la Trata de Personas, no solo dedicándonos a perseguir y castigar a los tratantes, sino también garantizando el trato humano y digno de las víctimas de este delito.